divendres, 8 de març del 2013

MAÑANA DE LLUVIA EN LA CIUDAD



Llueve en Barcelona
y en cada gota
se me escapa una palabra.
Llueve en la ciudad
y el estrés secuestra el metro.
Todo se retrasa,
también la llegada del beso prometido.

Paraguas rotos
(víctimas de la tormenta)
duermen abandonados por las calles,
en las papeleras,
como presagio
de los días que han de venir,
reflejo de corazones olvidados.

Y ante todo este caos,
en este infierno terrenal y cosmopolita,
sus miradas penetrantes y lejanas,
sus piernas infinitas de terciopelo
y el deseo eterno bailando en su boca
me regalan la tentación de la huida.

Si no cambia nada
en este país de futuro azuloscurocasinegro
puede que un día acepte la oferta,
cruce el cristal
y acepte la escapada
con una de estas chicas de los anuncios.


6 y 7 de Marzo de 2013

14 comentaris:

JOAN ha dit...

En Barcelona hemos pasado una semana de lo más lluvioso, y una mañana nació este poema en medio de una ciudad que enloquece cuando caen cuatro gotas.

Ahora parece que la primavera ha llegado con fuerza, los termómetros van para arriba y ya vuelve a brillar el sol!

Abrazos para tod@s

Anònim ha dit...

Muy bueno el hilo conductor, me ha encantado como has pasado del gris del tiempo lluvioso, al color mas brillante y absoluto que proporciona una huida con una de esas chicas de anuncios, tan estupendas que invitan a soñar.(Por algo es publicidad).
Aquí sigue lloviendo, parece que la primavera estuviese secuestrada y como castigo a nuestros desvaríos no quiere concedernos el indulto del sol. Como siempre Besos de P

Anònim ha dit...

El día se presta para sacar muchas conclusiones... me gustó esa frase, Todo se retrasa, también la llegada del beso prometido.
Un placer leerte, te dejo un abrazo, buen fin de semana!

Isabel Motos ha dit...

La lluvia siempre resulta muy inspiradora. Me ha encantado, sobre todo ese comienzo, ese "Llueve en Barcelona y en cada gota se me escapa una palabra". :D
Por aquí abajo también llueve, aunque ayer tuvimos casi toda la tarde de sol.
Un abrazo! :)

Rodolfo Serrano ha dit...

Ay, Joan, que poema, dios!!!

luna ha dit...

a veces nosotros también nos sentimos como un paraguas que la tormenta ha destrozado... y es que los días de lluvia en las ciudades no son días sencillos, Un gran poema Joan!!!

Paula Olivieri ha dit...

La ciudad cuando llueve es linda solo si no hay que salir a trabajar!
Hermosa poesía.
Saludos!

Marina ha dit...

Per mi, un dels millors poemes que has escrit.

Potser també perquè ho he viscut, avui també plou, avui també em serveix aquest poema.

M'encanta, de debò.

PD: Perdona per no haver-lo vist abans!

Molts petons,


Marina

Guillem Serrano Bosch ha dit...

Sincer, valent, preciós... com sempre.

Dcamps ha dit...

Paso a contarte que hoy amaneció nublado. Amenaza la tormenta, pero sólo eso, amenaza. Nuestras lluvias son distintas, y no me refiero a cuestiones atmosféricas. Soy de los que creen que las lluvias lavan la ciudad. Esperemos sirva para eso, ¿no? Un fuerte abrazo!

mig ha dit...

Perfecto

Unknown ha dit...

¿Por qué será que la lluvia siempre nos ayuda a expresar los sentimientos? Y parece que a vos la lluvia te deja poemas bellos como estos, bendita lluvia, entonces! Un beso!

Iréz ha dit...

Como me gusta la lluvia, y que poco la disfruto.

Tras el agua, vienen palabras con fuerza.

me encanta el escrito :)

Elena ha dit...

te leo justo hoy!
será cosa del tiempo...
que me engaña y me hace creer que nada cambia y quiero gritar correr escapar...




saludos!